La muerte visita al dentista - Agatha Christie
¿Como empieza?
El señor Morley no estaba de muy
buen humor aquella mañana. Se quejó de la calidad del jamón y del café,
diciendo que tenía aspecto de barro líquido y que las frutas eran
peores en cada desayuno.
El señor Morley era un
hombrecillo menudo, de mandíbula enérgica y barbilla retadora. Su
hermana, que administraba la casa, era una mujer alta, bastante parecida
a un granadero. Mirando pensativa a su hermano, le preguntó si había
vuelto a encontrar el baño frío.
¿Qué cuenta?
Cuenta la historia de la muerte del
señor Morley. ¿Fue un asesinato? ¿O un suicido? Hércules Poirot debe de
resolver el asunto de su difunto dentista junto a Japp, un inspector de
policía. En el caso se ven implicados un espía griego, uno de los
financieros más rico y poderoso del país, la secretaria, un dentista
asociado a Morley y una ex-actriz entre otros. Un libro lleno de
misterio y emoción de la gran autora Agatha Christie.
El protagonista
El protagonista es Hércules Poirot,
un famoso detective en las novelas de Agatha Christie. El detective de
origen belga es el protagonista de 33 libros y 50 relatos cortos de la
autora. Esta lo detestaba, diciendo que él era insufrible, detestable,
ampuloso, pesado y egocéntrico, sin embargo, el público lo amaba, por lo
que es el protagonista de tantas obras.
Es el único personaje ficticio en
obtener un obituario en el New York Times, el 6 de agosto de 1975, año
en el que se publicó el libro en el que aparecía muerto: 'Telón'.
El fragmento
Antes del fragmento, quiero decir que
ni de lejos este es el final del libro, sólo una de las muchas teorías
que se presentan a lo largo del libro, por lo que lo siguiente puede ser
lo que acabe siendo o no.
Japp preguntó por míster Amberiotis.
El encargado miróle con bastante extrañeza.
-¿El señor Amberiotis? Lo siento, señor, pero me temo que no podrá verle.
-¡Oh, sí que puedo! --saltó Japp, enseñando sus credenciales.
-No me ha entendido, señor. Míster Amberiotis ha fallecido hace una hora.
A Hércules Poirot le pareció como si acabasen de cerrar una puerta sin ruido.
[...]
-Morley se suicidó. Ya sabemos el motivo.
-¿Cuál fue?
-Acabo de recibir el informe del doctor acerca de la muerte de
Amberiotis. No voy a repetirle las palabras técnicas, pero en lenguaje
sencillo le diré que ha fallecido por una dosis abusiva de adrenalina y
procaína. Cuando anoche nos dijo que no se encontraba bien, el pobre
diablo sólo decía la verdad. Pues bien, en conclusión: adrenalina y
procaína es la mezcla que los dentistas inyectan en las encías,
anestesia local. Morley, por error, inyectó una dosis extraordinaria y
cuando se dio cuenta de lo que había hecho no fue capaz de arrastrar las
consecuencias y se disparó un tiro.
-¿Con una pistola que no tenía?-Preguntó Poirot.
¿Por qué tienes que leerlo?
Simplemente, todos los libros de la
reina del misterio, Agatha Christie, son magníficos. Todos están
cargados de emoción y suspense, y este no se queda corto. Muchos giros
inesperados hacen el libro cada vez más interesante, y un final
sorprendente es la guinda del pastel. Lo recomiendo a todo el mundo que
sea fan del misterio, y también a los que no lo sean.
Alguna curiosidad
Se desarrolla en diez capítulos, adjudicando a cada uno de ellos una estrofa de una popular cancioncilla inglesa:
One, two, buckle my shoe.
(Uno, dos, abróchame el zapato)
Three, four, shut the door.
(Tres, cuatro, cierra la puerta)
Five, six, pick up sticks.
(Cinco, seis, coge los palos)
Seven, eight, lay them sraight.
(Siete, ocho, ponlos en orden)
Nine, ten, a good fat hen.
(Nueve, diez, una gallina gorda)
Eleven, twelve, men must delve.
(Once, doce, los hombres deben indagar)
Thirteen, fourtheen, Maids are courting.
(Trece, catorce, las doncellas pelan la pava)
Seventeen, eighten, Maids are waiting.
(Diecisiete, dieciocho, las criadas observan)
Nineteen, twenty, my plate is empty...
(Diecinueve, veinte, mi plato está vacío...)
Puntuación
Es un libro de diez, pero le doy un
nueve, quizá por el esfuerzo extra de intentar comprenderlo mejor dado
que se escribió en otra época, con un lenguaje un tanto diferente, pero
el esfuerzo merece la pena.
Miguel Hdez. Góngora, de 3º ESO A para:
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